Entre los nuevos retos para el mundo rural se encuentra un tema prácticamente olvidado para el sector. Se refiere al uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en el mundo rural.
Este tema de la digitalización en el campo no es aún una prioridad para los gobiernos de América Latina y el Caribe (ALAC). Prueba de ello es la escasa o nula mirada hacia la agricultura en las estrategias digitales de los gobiernos ni tampoco para los Ministerios de Agricultura de los países.
la digitalización en el campo no es aún una prioridad para los gobiernos de América Latina y el Caribe
Otro factor relevante es que los objetivos estratégicos de los países ALAC van dirigidos más bien hacia mejorar la conectividad digital, pero no hacia el uso y aplicabilidad de las TIC en el sector rural.
Las brechas a nivel rural son significativas:
– Nivel de ingreso: a mayor ingreso de la población, mayor acceso a Internet en todos los países de la región, influido por los costos del servicio y de la infraestructura requerida (computador, tablet, u otro).
Aunque también son importantes la falta de conocimiento respecto de los beneficios que puede ofrecer Internet al hogar y sobre el uso de un computador o teléfono celular para conectarse, por lo cual muchas veces, y en especial a nivel rural, se considera un gasto innecesario.
– Nivel educacional: a mayor nivel de escolaridad mayor acceso a las TIC, ello a pesar de los esfuerzos que realizan los diferentes países de la región para equipar digitalmente a sus escuelas.
Pero el desafío apunta más bien en lograr que los estudiantes las usen con un fin educativo y no solo de entretenimiento, lo cual supone también que los docentes sepan incorporar estas nuevas tecnologías en sus prácticas educativas, para así lograr realmente una alfabetización y una formación digital arraigada en la población entera.
– Temática de género, que de acuerdo a estudios realizados por CEPAL, en varios países de la región las mujeres igualan a los hombres en acceso a Internet, lo que indicaría que esta brecha digital de género estaría en vías de superación.
Esto viene también a posicionar bastante el rol de la mujer rural que generalmente es quién se hace cargo de los hijos en el hogar, les ayuda en sus deberes escolares y por tanto accede más frecuentemente a un computador.
Esto viene también a posicionar bastante el rol de la mujer rural
La exclusión del mundo rural en materia digital no es sólo un dato sociocultural, sino una debilidad productiva, financiera y comercial que afecta directamente la competitividad de las empresas agrícolas y la calidad de vida de los habitantes rurales.
Hasta el momento, se han implementado varias iniciativas tendentes a dotar de infraestructura y capacitación digital en los países. Sin embargo, el desafío fundamental es fomentar un uso más intensivo de las TIC en el campo.
