Los desafíos globales actuales nos hacen reflexionar sobre acciones a emprender para impulsar el desarrollo sostenible. La Agenda 2030 de Naciones Unidas y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) han marcado un cambio de paradigma, definiendo una realidad compleja y de desafíos compartidos.
La respuesta coordinada de cooperación del Equipo Europa, es decir, la Unión Europea, sus Estados Miembros e instituciones de desarrollo financiero europeas, apuntan a una cooperación internacional innovadora y más amplia, capaz de generar respuestas más ambiciosas y flexibles, de acuerdo a realidades de desarrollo dinámicas y multidimensionales.
La cooperación y el diálogo entre la Unión Europea, América Latina y el Caribe son fundamentales para el multilateralismo.
Gracias a una asociación histórica y a un impulso innovador, estos intercambios han servido para explorar nuevas formas de cooperación. Un multilateralismo renovado y más fuerte debe tomar en cuenta la alianza entre estas dos regiones como ejemplo hacia una cooperación renovada y reforzada en términos de ambición, innovación, flexibilidad y profundidad.
El potencial de la cooperación triangular
La Cooperación Triangular ha permitido movilizar soluciones diversas para innovar, aprender y resolver. Asimismo, ha impulsado la creación y el fortalecimiento de asociaciones más allá del esquema tradicional de la cooperación (donante-beneficiario), alcanzando un modelo más inclusivo.
A su vez, los tres roles inherentes a la modalidad triangular (beneficiario, primer oferente y segundo oferente) son los pilares de una estructura que facilita la creación de soluciones con un alto potencial de impacto. Al mismo tiempo, incrementa el volumen, alcance y sostenibilidad de las intervenciones. También favorece la flexibilidad, promueve la complementariedad y coordinación, permite compartir conocimiento y aprender de forma conjunta, generando apropiación y confianza.
Durante la celebración de la Segunda Conferencia de Naciones Unidas para la Cooperación Sur-Sur (PABA+40) en Buenos Aires, fuimos testigos de su éxito como laboratorio de ideas y nuevos tipos de cooperación.
También podemos celebrar el éxito de la primera fase del Programa ADELANTE en la que, gracias a ocho exitosos proyectos, 93 entidades de 22 países de la Unión Europea, América Latina y el Caribe trabajaron conjuntamente, generando redes de colaboración temáticas que se han mantenido.
La valoración positiva de las entidades implicadas, así como de nuestros interlocutores en cada uno de los países socios nos ha llevado a redoblar nuestra apuesta por la Cooperación Triangular.
Por ello, en 2021, siguiendo un proceso de reflexión y recopilación de aprendizajes sobre nuestro trabajo en materia de Cooperación Triangular, presentamos ADELANTE 2. Esta nueva fase se articula en tres componentes: uno de apoyo operacional, con la Ventana ADELANTE de Cooperación Triangular UE-ALC, uno de apoyo institucional, que busca la creación de fondos bilaterales, y uno de apoyo analítico, que busca desarrollar análisis y estudios.
La Cooperación Triangular es esencial para la alianza entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe.
Las iniciativas de Cooperación Triangular buscan aprovechar el conocimiento y la experiencia de las entidades de la Alianza para generar conocimientos nuevos que puedan impactar de forma eficaz a retos de desarrollo. Esta lógica genera un fortalecimiento de las capacidades de todas las entidades y de la propia Alianza, además de favorecer redes especializadas con impactos a corto y medio plazo.
Vemos cómo la Cooperación Triangular facilita la creación conjunta de soluciones, promueve la complementariedad, aumenta la coordinación, permite compartir conocimiento y aprender de forma conjunta, genera apropiación y confianza, incrementa el volumen, el alcance y la sostenibilidad de las intervenciones y favorece la flexibilidad. Todos los socios están llamados a contribuir y a beneficiarse.
En relación al apoyo institucional, se han firmado acuerdos para la creación de fondos bilaterales con seis países de la región (Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba y Uruguay) que pronto empezarán su ejecución para impactar y, a la vez, contribuir al debate sobre la Cooperación Triangular.
Alianza Unión Europea – SEGIB
En el caso del componente analítico, la Unión Europea trabaja con la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), organismo de pensamiento y guía de Cooperación Sur-Sur y Triangular en Iberoamérica. Mediante estudios técnicos y análisis de políticas públicas sectoriales e intersectoriales, buscamos analizar y evaluar el potencial del trabajo que hacemos y de la Cooperación Triangular como modalidad, con el fin de proponer soluciones para incrementar el valor añadido y fomentar la innovación. Estamos impulsando la mejora y la reflexión sobre este modelo de la mano de SEGIB.
La alianza de la Unión Europea con la SEGIB busca analizar y evaluar el potencial de la cooperación triangular, impulsando la mejora y reflexión sobre esta modalidad de cooperación.
ADELANTE 2 apuesta por innovación, flexibilidad y horizontalidad, diversificando la oferta y los instrumentos de la Cooperación Triangular entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe.
En definitiva, impulsamos un modelo de asociación horizontal, en el cual los socios intercambian conocimientos y comparten experiencias para dar respuestas a los problemas y retos de desarrollo es crucial. Las soluciones a los actuales desafíos de desarrollo provienen de todos los rincones del mundo, y a través de la Cooperación Triangular tanto la Unión Europea como América Latina y el Caribe pueden contribuir y beneficiarse.