Para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) no sólo debemos unirnos, sino también intercambiar conocimientos, capacidad técnica y de gobernanza. Además es necesaria una tecnología racional, invertir en recursos financieros y, sobre todo, hacer esfuerzos comprometidos con el cambio.
Tenemos ante nosotros desafíos de enormes dimensiones, algo que nos da lucidez y ánimo para, entre todos, aportar cada uno con su experiencia, ciencia, conocimiento, determinación y coraje.
Si bien por su dimensión es algo que de alguna forma nos asusta, a la vez nos motiva para hacer algo increíble, enorme, desafiante y apasionante.
Debemos ser conscientes de que contamos con aliados potentes, la tecnología, la innovación, la experiencia, la capacidad de cada uno de nosotros. Unidos somos capaces de hacer algo tan grande como es necesario.
“Si cada individuo es capaz de aportar su buen hacer, su fortaleza y su compromiso, entre todos podremos tener un resultado extraordinario”
Responsabilidad del sector privado
Uno es incapaz de barrer todas las aceras de una ciudad, pero si cada uno barre su trocito de acera, seguro que la empresa es llevadera.
Lo mismo pasa con los Objetivos de Desarrollo Sostenible: si cada individuo es capaz de aportar su buen hacer, su fortaleza y su compromiso, entre todos podremos tener un resultado extraordinario.
Debemos concienciar y dar el ejemplo, ser conscientes de nuestras fortalezas y aportarlas, conocer nuestras debilidades y superarlas.
Como sector privado, nos sentimos una de las palancas del cambio. El 99,9 % de las empresas del mundo somos Pymes, el colectivo que más empleos crea con mucha diferencia frente a otros actores y el que más trabajo de calidad ofrece.
Si tomamos conciencia de ello y somos capaces de sensibilizar a nuestros empleados, no sólo en el plano productivo sino también en el ciudadano, seremos el mejor vehículo para llegar más rápido y de una forma capilar a la población.
Responsabilidades
El Pacto Mundial de las Naciones Unidas (una iniciativa que reúne a empresas de todo el mundo para avanzar en los ODS) ha puesto el foco en el punto 67 del texto de la declaración 70/1 para transformar nuestro mundo y le da al sector privado un papel estratégico:
“La actividad empresarial, la inversión y la innovación privadas son los grandes motores de la productividad, el crecimiento económico inclusivo y la creación de empleo. Reconocemos la diversidad del sector privado, que incluye tanto a las microempresas como a las cooperativas y las multinacionales.
“Exhortamos a todas las empresas a que aprovechen su creatividad e innovación para resolver los problemas relacionados con el desarrollo sostenible.
“Fomentaremos un sector empresarial dinámico y eficiente, protegiendo al mismo tiempo los derechos laborales y los requisitos sanitarios y ambientales de conformidad con las normas y los acuerdos internacionales pertinentes”.
Como CEO de una Pyme familiar española, una de tantas que pertenecen al 99,9% de las empresas del mundo, el Pacto Mundial de Naciones Unidas me ha dado la oportunidad de formar parte de esta organización.
Y en nuestra empresa hemos aceptado el reto, un desafío universal y difícil a la vez que motivador y apasionante: hemos decidido ser parte de la solución y no del problema.
Nos sentimos felices y honrados de poder formar parte de la junta directiva del Pacto, la iniciativa de sostenibilidad más grande del mundo. Somo una de las millones de visiones y realidades que conforman las pequeñas pero imprescindibles aportaciones.
