América Latina debe aprovechar la oportunidad del contexto global y actualizar y diversificar sus relaciones económicas con Estados Unidos, Europa y China. Sin embargo, el principal desafío es interno: necesita diseñar políticas públicas modernas que favorezcan la innovación, la competitividad y el combate al cambio climático. Lo relevante es que en cada una de ellas hay un importante espacio para la cooperación regional.