Invertir en el empoderamiento económico de las mujeres contribuye directamente a la igualdad de género, la erradicación de la pobreza y el crecimiento económico inclusivo, señala ONU Mujeres.
Para debatir sobre estos temas, se celebró por primera vez en Argentina el capítulo regional del Women Economic Forum (WEF), un foro mundial que se realiza anualmente en New Delhi, India, y cuenta con más de 500 capítulos regionales.
Somos Iberoamérica habló con la directora general de WEF-Argentina, la abogada Lina Anllo.
¿Qué implicó para la Argentina ser sede del encuentro WEF este 2020?
“Para Argentina implica una exposición a nivel mundial y expone la lucha que las mujeres damos no solo en este país sino también en el resto del mundo para poder lograr la inclusión de la mujer”, dice Anllo.
El debate abarcó una amplia variedad de temas, como el rol y la participación de las mujeres en espacios de decisión, así como la inclusión de la perspectiva de género en distintos sectores de la economía.
Hubo un espacio para hablar de las mujeres en la primera línea de la lucha contra el COVID-19, así como de la violencia de género, el feminismo, las comunidades LGTIBQ+ y la discapacidad, entre otros.
Mujeres y COVID19
A mediados de año, la directora general invitó a la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, a participar en el ciclo de entrevistas virtuales organizadas por el Women Economic Forum Argentina.
En esa ocasión, las expertas también hablaron de los desafíos de la pandemia COVID-19 para las mujeres en cuanto al liderazgo y al empoderamiento de la mujer, pero también en lo referente a la necesidad de preservar los avances logrados en los últimos años en materia de igualdad.
En el caso de Argentina, Anllo menciona algunos de estos logros y retos.
“Por primera vez el presupuesto nacional 2021 tiene perspectiva de género; esto significa que el accionar del Estado contribuirá activamente a reducir las brechas entre mujeres y hombres en el país, con más de 55 medidas y políticas específicas”, precisa.
Pero si hay algo que ha mostrado la pandemia del coronavirus es la importancia de la economía de los cuidados y el aumento de su demanda.
Según un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, CEPAL, desde antes de la pandemia, las mujeres de la región dedicaban el triple de tiempo que los hombres al trabajo de cuidados no remunerado.
La construcción de sistemas integrales de cuidados es un factor fundamental para el logro del empoderamiento de las mujeres y la igualdad de género, y un elemento clave para la recuperación socioeconómica, concluye el informe.
En ese sentido, Anllo menciona como ejemplo la ley de teletrabajo aprobada en Argentina durante la pandemia, que reconoce el derecho de las personas teletrabajadoras a interrumpir la jornada laboral para dedicarse a las tareas de cuidado (por ejemplo: labores domésticas y cuidado de hijos o de adultos mayores).
Sin embargo, advierte la abogada, “para visibilizar las tareas de cuidado y además distribuirlas equitativamente será necesario un compromiso público-privado, a través de licencias compartidas más extendidas, entre otras variadas medidas”.
Anllo coincide con Grynspan en que “no hay que bajar los brazos”.
“Tal como nos dijo Rebeca Grynspan en nuestro ciclo de charlas virtuales del WEF, hemos entrado en la era de la insistencia; insistir para lograr la tan justa igualdad”, recuerda.
El evento virtual contó con tres salas simultáneas, unos 60 paneles y más de 150 oradoras y oradores de alto nivel de diferentes lugares de Argentina, América Latina y el resto del mundo, entre los que se encontraban la directora regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe, María Noel Vaeza; el premio Nobel de la Paz Adolfo Perez Esquivel y la Primera Dama de Argentina, Fabiola Yañez.