Con la creación del Instituto Nacional de los pueblos Indígenas (INPI), en diciembre de 2018, ha quedado registrado un acto elemental de justicia social y un primer paso hacia el pleno reconocimiento y ejercicio de los derechos de los pueblos indígenas y afromexicano.
El INPI es la instancia del Gobierno de México que impulsa una nueva relación entre el Estado y los pueblos indígenas y tiene como fin definir, ejecutar, orientar, coordinar, promover, dar seguimiento y evaluar las políticas, programas, proyectos, estrategias y acciones públicas, que garanticen la implementación de los derechos de los pueblos Indígenas y afromexicano, su desarrollo integral y sostenible y el fortalecimiento de sus culturas e identidades.
Contar con una institución pública que garantice el cumplimiento de los derechos de los pueblos originarios, está en concordancia con los estipulado en instrumentos internacionales, pero además coincide con el mandato presidencial de dar un trato preferencial a los más humildes y olvidados, como ha sido el caso de las comunidades indígenas y afrodescendientes de México.
Garantiza además la pluriculturalidad, partiendo de la premisa de que los pueblos indígenas y afromexicanos deben ser reconocidos como sujetos de derecho público, que ejercen su libre determinación y autonomía y cuentan con la capacidad para definir libremente sus procesos de desarrollo y bienestar, respetando sus culturas e identidades.
Derechos humanos
El INPI trabaja con un enfoque de derechos humanos, en ámbitos como la autonomía, libre determinación, solución de conflictos en tierras, territorios y recursos naturales, el fortalecimiento de los sistemas normativos y la eliminación de la violencia en contra de los pueblos indígenas.
Además, desde la creación del Instituto, se ha brindado una atención integral focalizada y especializada que contribuye a fortalecer los procesos impulsados por las propias comunidades y responde a un enfoque de derechos humanos.
Al mencionar el derecho fundamental a “la consulta libre, previa e informada”, se destaca la Consulta para la integración del Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, y la Consulta para la Reforma Constitucional y Legal sobre Derechos de los Pueblos Indígenas y Afromexicano, en la que participaron los 68 pueblos indígenas y afromexicano. De igual manera, el INPI participó como órgano técnico en diversos procesos de la materia, respetando los estándares internacionales.
“El INPI quiere impulsar el reconocimiento y respeto de los derechos fundamentales de los pueblos indígenas en México, su autodeterminación, tradiciones, cultura y promoción de acciones desde los ámbitos comunitarios”
Reconocimiento jurídico
Partiendo de que la nueva relación del Estado mexicano con los pueblos indígenas y afromexicano se basa en su reconocimiento jurídico como sujetos de derecho, el INPI trabaja en el ejercicio de derechos tan fundamentales como la autodeterminación, respetando sus tradiciones y cultura y promoviendo acciones desde los ámbitos comunitarios.
Las acciones que se han llevado a cabo también se han enfocado en el conocimiento y ejercicio de los derechos de las mujeres indígenas y afromexicanas en sus diferentes etapas de vida y condiciones de vulnerabilidad, para contribuir a la igualdad de hombres y mujeres.
Estos objetivos se han materializado en proyectos capacitación y difusión sobre los derechos de las mujeres, formación de liderazgos, prevención y atención de las violencias por razón de género y prevención del embarazo en adolescentes.
Por lo anterior, el INPI ha permitido una participación directa de los pueblos y comunidades indígenas, respetando en todo momento sus propias instituciones, formas de gobierno y organización.
Esto se ha traducido en un acceso efectivo a la jurisdicción del Estado, procesos de cambios de régimen político-electoral, creación de municipios indígenas, consultas realizadas a los pueblos y comunidades indígenas y el pleno reconocimiento como sujetos de derecho público.
Por último, en el marco del Año Internacional de las Lenguas Indígenas, el INPI desarrolló el proyecto “Códice México”, una plataforma en línea que recupera el concepto de la tabla periódica de los elementos, para sistematizar de manera similar, la complejidad de la diversidad lingüística de México.
Se trata de un instrumento didáctico para la difusión de las familias lingüísticas, agrupaciones de lenguas y variantes dialectales. Destaca además la existencia del Sistema de Radiodifusoras Culturales Indígenas (SRCI), que cuenta con 21 emisoras en 16 entidades del país y transmite en 33 lenguas indígenas nacionales y en español.
A través de esta red, se informa a las comunidades en su propia lengua y con base en su propia cultura, una iniciativa que fortalece el reconocimiento de la diversidad lingüística y cultural de México.